Reformas laborales en América Latina

Los efectos de una reforma tan importante como la impulsada por el actual gobierno de Brasil, siguen una lógica que ya se ha implementado en otros países y que apunta a una transformación completa de las relaciones laborales, situación que ha despertado interés y preocupación en amplios sectores de la sociedad. A esto se suman los planes de reformar la Seguridad Social, aspecto en el que América Latina ha sido laboratorio de experiencias con resultados muy diversos a la hora de un balance. Para conocer y debatir sobre esta realidad realizamos el 11 de setiembre un nuevo Debate Internacional en coordinación con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.

El debate contó con la participación del ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro; el ex – ministro de Seguridad Social de Brasil, Carlos Eduardo Gabas; el secretario de Política Económica y Desarrollo Sostenible de la Confederación Sindical de Trabajadores/as de las Américas, Rafael Freire; el representante de la FES en Uruguay, Sebastian Sperling; el catedrático de Derecho del Trabajo y Seguridad Social, Dr. Juan Raso Delgue; y el profesor de Derecho del Trabajo de la Universidad de Montevideo y miembro de Pérez del Castillo y Asociados, Dr. Santiago Pérez del Castillo.

Freire fue el primero en intervenir planteando la perspectiva de los/ las trabajadores y aseguró que la reforma laboral impulsada en Brasil “no tiene nada que ver con la modernización laboral” y que si hubiera sido pueda a votación en elecciones no se hubiera aprobado. A su vez, opinó que este tipo de “políticas conservadoras tienen influencia más allá de las fronteras nacionales”, por lo que es necesario tener una respuesta global a las mismas. Para el ex – ministro brasilero, la reforma amplía y fortalece la especulación empresarial, no la producción como se afirma. Gabas aseguró que un país que quiere salir de la desigualdad tiene que invertir en políticas sociales y que para garantizar sostenibilidad “no es necesario destruir todo el sistema de protección social” como lo hace la actual reforma.

Juan Raso Delgue, hizo una presentación donde caracterizó el momento actual y dijo que “hay un ataque frontal de los estados nacionales al poder sindical para mejorar la competitividad”; y criticó duramente la reforma, a la que definió como “profundamente flexibilizadora y anti sindical”. En su intervención, Santiago Pérez Del Castillo, hizo referencia a aspectos legales y dijo que en situaciones de negociación “el convenio de rama debe primar sobre el de la empresa”.

Finalmente, el ministro Murro, expresó su preocupación por los efectos que este tipo de reformas pueden tener en la región. En referencia a la ley dijo que tiene falencias de forma y contenido, porque “prescindió del diálogo y negociación para su elaboración y puesta en marcha”. En ese sentido manifestó que “si se desplaza a los sindicatos de la discusión de las políticas hay un debilitamiento de la democracia”. En referencia a su gestión dijo “el gobierno del Frente Amplio no va a transitar el camino de Brasil” y que no quieren “cualquier desarrollo” sino “un desarrollo económico con justicia social y con empresas sustentables”.